Se denomina principalmente como deuda mala aquella que financia bienes de consumo (televisores, iphone, etc) de los cuales no se espera que genere rentabilidad a corto plazo ni largo plazo.

A deuda buena, denominamos aquella que tras invertir el capital, se obtienen unos rendimientos por encima de los intereses que se están pagando.

En resumen;

Pago deuda 4% TAE

Reembolso beneficios 6%

Tu rendimiento nominal sería del 2% anual.

Pero, ya la inflación como afectaría, si calculamos la tasa real.

Nominal = 2% – Inflación.

Actual 2% – 10% = -8% de crecimiento, ¿no?

Si lo analizamos detenidamente y por separado; se paga un 4% de interés y hay una inflación del 10%, sólo por el crédito se obtendría un 6% de “beneficio” a lo que sumamos nuestra tasa de rendimiento, esta sería del 6%, mas el 6% anterior, sería igual al 12% de rendimiento.

En el párrafo anterior, se indica que es beneficio, la diferencia de lo que se paga de interés con respecto a la inflación, por el meno valor del dinero, que también se aplica a las deudas, estas tienen menor costo.

Por todo ello, la inflación, el precio del dinero, bonos, acciones, etc, todo es relativo y lo que debemos es buscar un equilibrio entre todas las variables que nos puedan afectar, ya que la misma variable, por ejemplo, la inflación, nos puede estar afectando negativamente en una inversión y de forma positiva en otra, como hemos visto.

El equilibrio entre renta variable, renta fija e inversiones inmobiliarias (compra-venta y alquiler) para conseguir una tasa real de beneficio a largo plazo en nuestra consecución de la libertad financiera.